lunes, 30 de julio de 2012

Biblioteca Foral, cultura al desnudo


En el 2007, el equipo de arquitectos de IMB terminan la remodelación de la biblioteca foral, obra original de Juan Carlos Guerra (1924). Y con una idea simple pero genial consiguen algo más que un cambio infinitesimal en el paisaje de Bilbao y en la historia de la arquitectura de la ciudad.

 La gente de IMB ha desmantelado el concepto de biblioteca como contenedor de libros y dando la vuelta al edificio como a un calcetín, han terminando exponiendo su interior a la luz del día y a la curiosidad de los peatones.

 Abrir las ventanas y que circule el aire es el mejor estímulo que se puede dar a la cultura. La visión de los lomos multicolores de los libros puede conseguir ese efecto haciendo que les perdamos el miedo pero no el respeto.

Solo cabe preguntarse por el sentido de las frases que arañan las cristaleras. Tal vez su ausencia hubiera conseguido un efecto más transparente y quizá más efectivo.